miércoles, 10 de octubre de 2012

A propósito de la amistad

Mi clase de hoy es especial Querido/a alumno/a: Alguna vez alguien me dijo: que para ser feliz no importa lo que el mundo te ofrezca, sino lo que tú puedas ofrecer, porque todo lo que es bueno a los ojos del Señor sólo valen las buenas obras y acciones. La vida no es fácil, un camino sin piedra no es camino, no te compares con nadie, mídete contigo mismo; es la única manera segura de avanzar. La humildad es una virtud maravillosa, casi inalcanzable, pero no imposible con los años aprenderás que son los atajos los que alargan el camino, que la ruta más rápida y segura es la que ya conoces, que nada es gratis en la vida, que todo debes ganártelo o merecerlo que ser útil es mejor que ser importante. Aprende a dominar tus iras y enojos se tolerante, cuántas veces lo serán contigo, jamás agredas a otro, no olvides lo que dijo el poeta: “El golpe daña más al que lo da, que al que lo recibe” estira la mano sólo para dar o ayudar, quiere a tus familiares y amigos con todos sus defectos o correrás el riesgo de quedarte sólo, porque el ser perfecto no existe y acostúmbrate a escuchar; los consejos no se discuten, se agradecen. Recuerda que la belleza es fugaz, que el poder es circunstancial y que la riqueza es ajena que a fin de cuentas, sólo es tuyo lo que consumes que por más dinero que tengas, no serás mejor, no sabrás más, ni serás más bueno ni siquiera podrás comer o dormir más que cualquier mendigo. En todos los actos de tu vida trata de ser justo, piensa en los demás; deja que tu corazón cumpla con su deber, su destino es querer; para eso lo hizo Dios por lo menos eso pienso. Aprende a valorar el amor que te dan, tal vez sea lo máximo que puedan ofrecerte no todos tenemos la misma capacidad de sentir y de dar, dichoso tú si puedes hacer feliz al ser que amas. Cada vez que sientas ternura y afectos de tus familiares: papá, mamá, hermanos, no te contengas todos tenemos una necesidad increíble de cariño sea cual fuere tu edad, ten tus cosas en orden; enseña a vivir con amor a tu familia; si están alejados o resentidos, perdónense, nunca es tarde. La vida es tan corta. Hasta pronto, con mucho afecto y cariño Profe Fernando.